lunes, 6 de mayo de 2013

El temperamento v/s el Fruto del Espíritu


Texto bíblico: Gálatas 5:22-23

Propósito: conocer las 12 combinaciones principales que derivan de los 4 temperamentos básicos,  conocer las componentes del fruto del Espíritu y entender  su interrelación entre  el fruto del Espíritu  y nuestro temperamento,  para entender como deberíamos comportarnos de una manera  recta  y honrosa.

Introducción:

1.- Las 12 combinaciones principales, sus fortalezas y debilidades.

2.- Los 9 componentes del fruto del Espíritu

3.-  La interrelación las necesidades del temperamento y el fruto del Espíritu, para un mejor desarrollo de nuestra vida cristiana

 Contexto histórico y bíblico:

 El libro de  Gálatas fue escrito por el apóstol Pablo  alrededor del 49 dC, desde la ciudad de Antioquía, antes del concilio de Jerusalén que se realizó un año después, es decir en el 50 dC. Pablo escribió esta carta a las iglesias del sur de Galicia, las que fundó durante su primer viaje misionero, pero también, debido a su rico contenido es aplicable a los cristianos de cualquier lugar del mundo y época.

La controversia que imperaba en la iglesia primitiva,  fue la convivencia entre los nuevos creyentes y los judíos mesiánicos o los mismos judíos que los juzgaban y discriminaban por no guardar la ley.

De manera muy particular, este fue un problema  para todos los nuevos cristianos y las nuevas iglesias que Pablo fundaba.  Debido a esto, Pablo escribe esta carta para corregir este problema que más tarde sería resuelto y legalizado por los líderes de la iglesia de manera oficial en el concilio de Jerusalén.

1.- Las 12 combinaciones `principales de temperamentos y sus cualidades  más  importantes:


 Fortalezas: Es el más extrovertido de todos,  carismático,  orientado a las personas, entusiasta, vencedor,  organizado, productivo.  Su campo de acción es claramente el trabajo con personas, atención de público, ayuda social, entre otros.

Debilidades: Suele hablar demasiado, se expone a si mismo y sus debilidades, se expresa fuerte y ruidosamente, prejuicioso, si se siente amenazado puede ser hostil, irascible, olvidadizo, se justifica mucho, egoísta, pusilánime y es el más `propenso a la carnalidad

El Poder del Espíritu Santo puede transformarlo en una persona altamente productiva y eficaz

1. 2.- El SANMEL (David)

Fortalezas: Empático, se interesa y sufre realmente el dolor ajeno, le gustan las artes y la música, perfeccionista, franco, de convicciones claras.  Su campo de acción es orientado a las personas, trabajo público o social, Liderazgo, etc.

Debilidades: Sumamente emotivo, almático, cambia fácilmente de ánimo, llora con facilidad, impulsivo, poco disciplinado

El poder del Espíritu Santo puede ayudarlo a vivir una vida libre de tropiezos y errores y darle un propósito firme

1. 3.- El SANFLEM (Apolo)

Fortalezas: Simpático, conversador, agradable, querido por la gente, gentil., cómodo, feliz, de buen humor, atraen a los demás, aman a los demás y no dañarían a nadie a propósito. Siempre ve el lado bueno, Su campo de acción es la interacción con personas, tales como ventas, servicios de atención y ayuda, medicina, voluntariado, etc.

Debilidades: Introvertido, propensos al ambiente, poco motivados y disciplinados, prefiere conversar antes que trabajar, 

El Poder del Espíritu Santo puede convertirlo en un gran líder.

1. 4.- El COLSAN (Santiago)

Fortalezas : Muy extrovertido, práctico y lógico, activista, productivo y lleno de propósito, perseverante, muy dedicado, carismático, de buen trato, motivador, buen orador, no se amedrenta, temerario, y posee una energía sin límites, sólo tiene dos velocidades directa y freno. Su cerebro está siempre en marcha.  Su campo de acción es el trabajo con gente, abogado, motivador, maestro, predicador, pastor, administrador, comunicador, cientista, político,

Debilidades: Puede ser hostil, explosivo, estresante, impaciente, extremadamente franco, se desconcentra fácilmente, prejuicioso, impetuoso, consigue lo que se propone a cualquier costo.

El Poder del Espíritu Santo puede transformarlo en un evangelista por excelencia y ganar a muchos para Cristo.

1. 5.- El COLMEL (Pablo)

Fortalezas: Extremadamente laborioso, disciplinado y capaz, optimista, práctico, orientado al a meta y al objetivo, posee una mente analítica y gran inteligencia, es decidido y un líder muy completo, confiable, realiza trabajos extraordinarios y de gran detalle, muy preparado, investigador constante, ama el debate, extremadamente competitivo y poderoso en su actuar y desempeño, alcanza el éxito en la mayoría de lo que emprende. Su campo de acción es el liderazgo de personas, la administración, gerencia, docencia, formación de equipos de alto rendimiento, etc.

Debilidades: propenso a ser autócrata y dictador, despierta en los demás admiración y odio, trabajólico, puede ser hostil y causar resentimiento, le cuestan las relaciones interpersonales paradójicamente con sus más cercanos, muy estricto y difícil de complacer, perfeccionista,

El Poder del Espíritu Santo puede transformar su vida al  extremo de convertirlo en un líder y maestro potencial, un cristiano notable y ferviente seguidor de Cristo, un ejemplo de vida y conducta para  los demás que predique no sólo con la boca sino con el ejemplo.

1. 6.- El COLFLEM (Tito)

Fortalezas : Es el más manso de todos, caluroso, tranquilo, reposado, deliberado y calmado, muy organizado, trabajador, de ideas y rumbo claro, tolerante, le gusta ayudar al resto a crecer y mejorar. Su campo de acción es la consejería, la ayuda familiar, la administración, la enseñanza. Son buenos esposos, padres y amigos.

Debilidades: Puede anidar amargura y resentimiento, sarcástico, puede ser muy terco si se lo propone, le cuesta arrepentirse y reconocer sus errores,

El Poder del Espíritu Santo puede transformar convertirlo en un gran guía y maestro así como un buen  pastor.

 

 

1. 7.- El MELSAN (Elías)

Fortalezas: Muy dotado talento artístico, estudioso, detallista, comunicador, abnegado, servicial. Su campo de acción es la música, las artes en general, la enseñanza, las ciencias sociales.

Debilidades: muy cambiante, de doble ánimo, malhumorado, puede ser muy ofensivo si se lo propone o muy encantador, autocompasivo, muy emotivo, rígido y no se involucra si algo no se hace a su manera, idealista, temeroso, inseguro a pesar de sus capacidades, baja autoestima.

El Poder del Espíritu Santo puede transformarlos en útiles y poderosos motivadores de la iglesia, tales como ministros, sacerdotes, profetas, predicadores.

1. 8.- El MELCOL (Moisés)

Fortalezas: Fuerza de voluntad, determinación, puede hacer todo bien si se lo propone, perfeccionista, fuerte liderazgo, organizado, responsable, talentoso en lo artístico. Su campo de acción es Dirección, jefatura, liderazgo, enseñanza, empresario, director de orquesta o coro.

Debilidades: Emocional, almático, su lengua lo traiciona, exigente, difícil de complacer, insatisfecho, intolerantes si se lo proponen, puede ser hostil y muy crítico si se lo propone, puede deprimirse y desmotivarse fácilmente, irascible con Dios y sus semejantes, estallan si se les confronta

El Poder del Espíritu Santo puede transformarlo en un gran líder de la iglesia.

1. 9.- El MELFLEM (Juan)

Fortalezas: Afables, se relacionan bien con los demás, perfeccionistas, analíticos, eficaces, organizados, humanitarios, estudiosos, investigadores, buenos matemáticos y escritores, inventores. Su campo de acción son las ciencias, la investigación, la innovación, el desarrollo de nuevas ideas, emprendedores.

Debilidades: Se desalienta fácilmente, puede ser muy negativo, irascible y puede ser hostil, vulnerable al temor y la ansiedad,

 El Poder del Espíritu Santo puede transformarlo en un fiel seguidor y guardador de la palabra, un gran líder de la iglesia.

1. 10.- El FLEMSAN (Timoteo)

Fortalezas: Es congenial, feliz, cooperativo, atento, orientado a las personas, diplomático, confiable, divertido, afable, pacífico, hogareño.  Su campo de acción son las áreas de servicio, especialmente en la iglesia, es un buen esposo y padre de familia y toma un papel activo en la obra del Señor.

Debilidades: desmotivado, y poco disciplinado, evita los grandes esfuerzos, temeroso, inseguro,

 El Poder del Espíritu Santo puede transformarlo en un gran hombre de fe, evangelista, maestro, y emprendedores.

1. 11.- El FLEMCOL (Abraham)

Fortalezas: De fácil trato, afable, carismático, líder natural, buen consejero, sabe escuchar, interesado en los demás. Su campo de acción es el trabajo con personas, Consejería, enseñanza, dirección,

Debilidades: Falta de motivación, temeroso, puede ser muy terco si se lo propone, se reusa a ceder, irascible, sedentario, pasivo, dado a mentir,

El Poder del Espíritu Santo puede transformarlo en un hombre de fe, valiente y decidido, que le crea a Dios y acepte desafíos.

1. 12.- El FLEMMEL (Bernabé)

Fortalezas: Es el más gentil, lleno de gracia. Plácido, atento, grata compañía, de buen comportamiento, sencillo, confiable, misericordioso, ayudador, ordenado, organizado, trabaja bien bajo presión. Preocupado de su casa. Su campo de acción son las áreas de servicio, sobretodo aquellas que requieren de trabajo en equipo pues atrae a los demás a trabajar con él.

Debilidades: pasivo, temeroso, puede llegar a ser egoísta si se lo propone, crítico, poca autoestima, miedo a involucrarse demasiado o asumir responsabilidades,

El Poder del Espíritu Santo puede transformarlo en un gran motivador, emprendedor, y confiable, colaborador de obra.

 

2.-  Los 9 componentes del fruto del Espíritu (Gálatas 5: 22-23)

Cuando el temperamento del hombre es controlado por el Espíritu Santo, deben aflorar en nosotros:

2.1.- El AMOR  (Marcos 12:30-31)

Un amor a Dios que haga que el hombre quede más interesado en las cosas del reino de Dios que en el reino material en el que vive es un amor sobrenatural (AGAPE), porque el hombre por naturaleza es una criatura codiciosa.

2.2.-  El GOZO: (Romanos 8:28; Salmo 4:7; Filipenses 4:4; Lucas 10:20)

El gozo dado por el Espíritu Santo no depende de las circunstancias de la vida, sino que depende de la obra que nosotros le permitamos a Dios en nuestras vidas, depende de mi actitud hacia lo que me sucede. Las circunstancias no me mueven a mí porque el victorioso vive en mí.

2.3.-  La PAZ (Juan 14:27; Apocalipsis 3:20; Romanos 5:1; Filipenses 4: 6-7)

Esta paz tiene un doble significado, no se trata sólo de una vida libre de sobresaltos, o preocupaciones, se trata de dos cosas:

La Paz de Dios  y La paz con Dios

La paz de Dios es el antídoto a la ansiedad que nos permite vivir libres de temor y afrontar las pruebas en victoria

La paz con Dios es el resultado de la salvación por medio de la fe y la restauración de nuestra relación con EL, pasando de enemigos a amigos e hijos de Dios.

2.4.- La PACIENCIA: (Romanos 5:3; Efesios 4:2, Santiago 1:3)

Es la capacidad de soportar daños o de sufrir reproches o aflicciones, sin responder de igual manera. Una persona paciente, hace las tareas humildes o enfrenta las quejas con gentileza, sin quejarse y sin resentimiento.

2.5.- La BENIGNIDAD: (Marcos 10:13-14; Romanos 2:4; Colosenses 3:12)

Es la capacidad de realizar actos atentos, educados, delicados, compasivos,  con gentileza. Implica cuidara a aquellos que son más débiles y desamparados.

2.6.- La BONDAD: (Salmo 25:7; Romanos 15:14; Tito 3:4)

Es la capacidad de tratar a  otros con benevolencia en el más  puro de los sentidos, es decir, aplicar la  hospitalidad,  con corazón desprendido, sin interés en recibir algo a cambio, El actuar con bondad se puede identificar en hacer todo lo que senos venga a la mente siempre y cuando no atente contra las verdades de la biblia.

2.7.- La FE o FIDELIDAD: (Números 13:33; Romanos 10:17; Salmo 27:14: Hebreos 11:1; Gálatas 5:22)

La biblia nos enseña que hay dos fuentes de la FE.  La primera es que la FE viene por el  oír la palabra de Dios (Romanos 10:17) y la segunda fuente es el Espíritu Santo. (Gálatas 5:22)

2.8.- La MANSEDUMBRE: (Eclesiastés 10:4; Gálatas 6:1; Efesios 4:2; Santiago 1:21)

La mansedumbre no es algo natural en nosotros, por el contrario, la naturaleza humana  es orgullosa, ególatra, altiva, arrogante, eta, pero el mejor ejemplo de mansedumbre lo aprendemos de nuestro Señor Jesús. Aún el temperamento más iracundo puede ser controlado por la llenura del Espíritu Santo.

2.9.- La TEMPLANZA O DOMINIO PROPIO (Gálatas 5:23; 2ª Timoteo 1:7: 2ª Pedro 1:6

El dominio propio se puede definir como autocontrol o autodisciplina, pero esta capacidad no es propia del comportamiento o temperamento humano, sino de la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas.  El temperamento  controlado por el Espíritu Santo será fiable, y ordenado, de lo contrario será un caos y un infierno.

Al considerar estos 9 rasgos de un hombre lleno del Espíritu, no sólo conseguimos una imagen de lo que Dios quiere de nosotros, sino de lo que EL puede hacer con nosotros a pesar de nuestro temperamento natural sea cual sea, sin embargo debemos tener claro que ninguna mejora puede provenir de nosotros, mismos, sino de la acción del Espíritu Santo en nuestras vidas. Es por eso que es tan necesario que seamos llenos del Espíritu Santo.

 

3.- Las necesidades de cada temperamento acerca de  fruto del Espíritu

 Si bien es cierto todos necesitamos que los 9 rasgos del fruto del Espíritu Santo se reflejen en nuestras vidas, debido a nuestro temperamento habrá algunos que necesitaremos con mayor urgencia y otros que nos costarán menos porque cada rasgo está asociado a un tipo de temperamento, y de esa manera podremos optimizar nuestro crecimiento, según nuestras propias  fortalezas y debilidades:

3.1.- Las necesidades del temperamento sanguíneo:

Todo sanguíneo necesita al menos 6 de los 9 rasgos para al menos vivir una vida agradable delante de Dios, lo que no significa que sea perfecto, pero debido a su carácter los otros rasgos están presentes en su temperamento y serán más fáciles de potenciar. Los siguientes son los rasgos mínimos que debería desarrollar y esforzarse por cultivar para ser el hombre o mujer que Dios desea:

3.1.1- La paz: EL sanguíneo es inquieto y explosivo por naturaleza, por lo tanto si logra afrontar las presiones y dificultades de la vida con un rostro pasivo y tranquilo ESO ES UN MILAGRO DE DIOS.

3.1.2.-La paciencia: El sanguíneo es inconstante en todos sus caminos, por lo tanto necesita con urgencia la paciencia de Dios para acabar lo que comienza y no quedarse en el camino

3.1.3.- La benignidad: El sanguíneo es por naturaleza hostil, y dañino, pero la benignidad de Dios suavizará su injuriosa lengua.

3.1.4.- La mansedumbre; el sanguíneo es por naturaleza  egocéntrico y sólo el poder del Espíritu Santo puede transformar su ego en humildad.

3.1.5.- La FE: el sanguíneo es temeroso por naturaleza y sólo la Fe en Dios puede saciar su hambre de seguridad y permitirle afrontar las pruebas con valor y confianza.

3.1.6.- El dominio propio: Sin duda la principal necesidad el sanguíneo es el dominio propio, su falta de disciplina resulta ser destructiva y su perdición. Sólo la templanza que el Espíritu Santo puede forjar en sus temperamentos les permitirá alcanzar su verdadero potencial.

 

3.2.- Las necesidades del temperamento colérico:

Todo colérico a simple vista parece que no tiene  necesidades emocionales, pero no se lo crea, sí que las tienen, pero tan escondidas que ni ellos mismos se dan cuenta.  El colérico  necesita 7 de los 9 rasgos para al menos vivir una vida agradable delante de Dios, lo que no significa que sea perfecto, pero debido a su carácter los otros rasgos están presentes en su temperamento y serán más fáciles de potenciar. Los siguientes son los rasgos mínimos que debería desarrollar y esforzarse por cultivar para ser el hombre o mujer que Dios desea:

3.2.1- El amor: La naturaleza insensible del colérico es un verdadero reto para el Espíritu Santo, pero como para Dios n hay imposible, el colérico puede  llegar a amar profundamente a su prójimo cuando es lleno del Espíritu Santo.

3.2.2.-El gozo : El colérico es muy difícil de complacer por naturaleza, y eso puede provocarle infelicidad, pero cuando el Espíritu Santo llena su vida encuentra la alegría y la satisfacción que sólo Dios puede darle.

3.2.3.- La paz: El colérico trabaja incansablemente y eso no lo deja en paz, pero una vez que el Espíritu Santo ha llenado su vida, seguirá trabajando pero con una sensación de paz que nunca imaginó poder sentir.

3.2.4.- La benignidad: Nadie puede ser más duro y cortante que el colérico, por eso cuando veas a uno hablando gentilmente estarás presenciando un milagro de Dios. Sólo el poder de Dios  puede controlar su  terrible lengua

3.2.5.- La bondad: El colérico busca hacer algo que valga la pena y lo lleve a un nivel superior, pero sólo el Espíritu Santo puede motivarlo a involucrarse en las vidas de los demás.

3.2.6.- La mansedumbre:  El colérico tiende a confundir la mansedumbre con debilidad, lo que es totalmente opuesto a su carácter  voluntarioso, soberbio y enaltecido, pero es necesario que comprenda que es mucho mejor a que se humille voluntariamente bajo la mano poderosa de Dios, antes que dejar esa tarea al Espíritu Santo.

3.2.7.- La FE: El colérico confía demasiado en sus  capacidades y se lanza en picada en la dirección que elige pero debe entender que sólo la guía del Espíritu Santo  será su mejor aliada.

3.3.- Las necesidades del temperamento melancólico

Dios ha usado a más melancólicos en la biblia que a todos los otros temperamentos juntos.

El melancólico necesita 5 de los 9 rasgos para al menos vivir una vida agradable delante de Dios, lo que no significa que sea perfecto, pero debido a su carácter los otros rasgos están presentes en su temperamento y serán más fáciles de potenciar. Los siguientes son los rasgos mínimos que debería desarrollar y esforzarse por cultivar para ser el hombre o mujer que Dios desea:

3.3.1.- El amor: La naturaleza  egocéntrica  del melancólico y su tendencia  al perfeccionismo los hace muy impacientes e irrespetuosos con aquellos que son diferentes.  Sólo el Espíritu Santo puede poner en ellos amor genuino por aquellos que no dan la altura a sus exigencias.

3.3.2.-El gozo: El melancólico tiene la necesidad absoluta de que el Espíritu Santo lo llene  para que el gozo del Señor reemplace su naturaleza variable, deprimida y afligida.

3.3.3.- La paz: el melancólico vive en la crítica y la condena con hostilidad, pero sólo el Espíritu Santo puede transformar con su paz ese corazón tan abrumado

3.3.4.- La mansedumbre: Sólo el Espíritu Santo puede llenar un corazón de mansedumbre y  reemplazar la arrogancia por humildad verdadera.

3.3.5.- La Fe : La tendencia enfermiza del melancólico a desconfiar y temer por lo que sucederá en el futuro, sólo puede ser reemplazada por la fe que el Espíritu Santo pone en el corazón cuando lo llena y  así capacitarlo para emprender una nueva vida confiado en Dios.

 

3.4.- Las necesidades del temperamento Flemático:

Los flemáticos son personas muy agradables y son los que más actúan como cristianos antes de llegar a serlo que la mayor parte de nosotros después de serlo, sin embargo tienen tanta necesidad de ser llenos del Espíritu Santo como los demás temperamentos.

El flemático necesita 4 de los 9 rasgos para al menos vivir una vida agradable delante de Dios, lo que no significa que sea perfecto, pero debido a su carácter los otros rasgos están presentes en su temperamento y serán más fáciles de potenciar. Los siguientes son los rasgos mínimos que debería desarrollar y esforzarse por cultivar para ser el hombre o mujer que Dios desea:

3.4.1.- El amor: La naturaleza  desmotivada y despreocupada del flemático lo hace un candidato ideal y muy carente de amor, pero cuando es lleno del Espíritu Santo, su gentileza se transforma en un espíritu se servicio que bendice a los demás.

3.4.2.- La paciencia: El flemático, adolece de esta cualidad pues es inconstante, pero sólo el Espíritu Santo le motivará a resistir y seguir adelante y correr la carrera hasta llegar al a meta.

3.4.3.- La Fe: El flemático es temeroso y ansioso por naturaleza, por lo tanto necesita con suma urgencia, la llenura del Espíritu Santo, para vencer sus temores y creer que Dios puede realizar lo imposible.

3.4.4.- El dominio propio: La pasividad y la tendencia a no hacer nada es propia del flemático, pero sólo el Espíritu Santo, curará esa tendencia y les dará una motivación a vivir una vida nueva en Dios.

Por Lenin Balbiano Nasiff

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